El vicepresidente económico del club, Ángel Martín Vaca
El consejo de administración del Oviedo no descarta tener que recurrir a una ampliación de capital como solución para afrontar los compromisos económicos a los que tiene que hacer frente hasta el final de temporada.El club empieza a acumular deudas y no pudo hacer frente a las cuotas de la Seguridad Social correspodientes al último trimestre del año 2010, por lo que ya tiene una orden de embargo del organismo público por importe de 136.966,15 euros. Son las cuotas de tres meses a las que se añadirán las de enero de este año (se abonan a mes vencido), alrededor de 45.000 euros, con lo que la situación económica empieza a ser muy preocupante.
El vicepresidente económico del club, Ángel Martín Vaca, reconoce un «desajuste y desviaciones del presupuesto», motivado por «un conjunto de circunstancias negativas» que han influido en que los ingresos corrientes de la sociedad estén por debajo de lo que se había previsto cuando se elaboró el presupuesto, entre ellos un descenso de los abonados, la eliminación temprana de la Copa del Rey y la mala temporada del equipo. No obstante, la principal causa la achaca al dinero que tenía que haber cobrado el club de la Caixa, «en octubre o noviembre, según nuestras previsiones».
El juez condenó a la Caixa en mayo de 2010 a pagar al Oviedo 479.854 euros más intereses (alrededor de otros 100.000 euros) por unos ingresos indebidos de 2004 y 2006. La entidad financiera había percibido esa cantidad una vez iniciada la suspensión de pagos del Oviedo, en la que la Caixa estaba incluida en la relación de acreedores del club.
En la sentencia, apelada ante la Audiencia Provincial, se abría la posibilidad de que el Oviedo instara su ejecución provisional para poder disponer del dinero inmediatamente, extremo al que se acogió el club azul. Sin embargo, el proceso se dilató y no fue hasta el pasado 11 de febrero, nueve meses después, cuando el secretario judicial dictaba un decreto ordenando la ejecución provisional de la sentencia.
La Caixa presentó entonces una solicitud de nulidad de las actuaciones para evitar que se realizase el pago antes de que se resuelva el recurso de apelación, previsto para el 29 de marzo, ya que teme que si el recurso le es favorable el Oviedo tenga dificultades para devolver los 600.000 euros una vez cobrados, y más teniendo en cuenta que ya tiene que afrontar una orden de embargo de la Seguridad Social por importe de 136.000 euros.
El Oviedo considera por su parte que el proceso de ejecución provisional sigue su cauce normal, por lo que sigue confiando en esos fondos (casi 600.000 euros) como única vía para solventar los problemas de liquidez.
Mientras tanto, la situación económica del club es muy delicada. Empieza a acumular deudas y dentro de diez días tiene que afrontar el pago de la nómina de febrero a los empleados y jugadores. Hasta el momento están al corriente de pagos, pero el margen de maniobra que tiene el club es nulo. Sin ingresos a la vista, los impagos se irán acumulando y la espiral negativa envolverá al club en una situación insostenible. Por ello, el consejo sólo contempla dos soluciones: la convocatoria de una ampliación de capital y, como segunda, que fructifiquen las negociaciones para la venta del paquete accionarial de Control Siglo XXII.
A la hora de establecer la posible cuantía de la ampliación de capital, fuentes del consejo indicaron que «se fijaría una vez que se conozca el informe del auditor».
De tener que recurrir a otra ampliación de capital, sería la tercera vez que sucede desde la llegada de Control Sport Siglo XXII al club azul, en enero de 2007, la primera por un importe de un millón de euros, y dos millones la segunda. La ampliación y la cuantía de la misma debe ser aprobada por una junta extraordinaria de accionistas.
Fuente: lne
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