domingo, 10 de octubre de 2010

El Oviedo rompe racha sin victorias y anota 4 goles ante peña Sport


El Real Oviedo se impuso (4-1) al Peña Sport en un partido que se decantó de su lado con tres goles en los minutos finales
*Los de Pichi Lucas pusieron fin a su racha de cuatro encuentros sin lograr una victoria
*Perona (2), Manu Busto y el visitante Txitxo en propia puerta marcaron para los locales


Real Oviedo, 4; Peña Sport, 1
ALINEACIONES:
Real Oviedo: Aulestia; Víctor Díaz, Negredo, López Ramos, Juanma; Jandro (Nano, min. 58), Falcón, Aitor Sanz, Manu Busto; Perona y Rubiato (Miguel, min. 74).
Peña Sport: Calvo; Sota (Lezaun, min. 90), Txitxo, Alex, Ainzua; Azpilicueta; Galán (David Ruiz, min. 63), Ederra, Soria, Uriz, y Gorka de Carlos (Arizkuren, min. 70)

ÁRBITRO:
Iglesias Villanueva, perteneciente al Comité Gallego. Amonestó a los locales Aitor Sanz y Manu Busto, y a los visitantes Calvo, Sota, Ainzua, Txitxo, Azpilicueta, Soria y Ederra.

GOLES:

1-0, min. 13. Perona, con la zurda
1-1, min. 33. Gorka de Carlos, de cabeza, tras falta lateral
2-1, min. 88. Manu Busto, de penalti
3-1, min. 90. Perona, tras asistencia de Manu Busto
4-1, min. 93. Txitxo, en propia puerta

INCIDENCIAS:
Encuentro correspondiente a la octava jornada del campeonato de Segunda B, disputado en el Carlos Tartiere ante 6.503 espectadores. Césped en buen estado. Se guardó un minuto de silencio en memoria de Manuel Barreto, padre del fisioterapeuta del Real Oviedo.

El Real Oviedo goleó (4-1) al Peña Sport y puso fin a la racha de cuatro partidos sin lograr la victoria. Los de Pichi Lucas se adelantaron en el marcador por medio de Perona, pero llegaron igualados al descanso tras anotar Gorka de Carlos a la salida de una falta lateral. En los minutos finales, Manu Busto, de penalti, Perona y Txitxo, en propia puerta, llevaron la tranquilidad a los locales, que se salen de los puestos de descenso y se aúpan hasta la zona media de la clasificación. El sábado se enfrentan al Athletic Club “B” en las instalaciones de Lezama y el técnico berciano no podrá contar con el centrocampista Aitor Sanz, que hoy recibió su quinta cartulina amarilla.


El entrenador oviedista, Pichi Lucas, introdujo dos novedades respecto al once inicial que el domingo pasado empató ante el Eibar. Los centrocampistas Aitor Sanz y Falcón sustituyeron a Marc Castells y Jorge Rodríguez, que ocuparon plaza en el banquillo.

El Real Oviedo volvió a mostrarse fiel a sus ideas futbolísticas y llevó la iniciativa del juego durante la primera mitad. Los de Pichi Lucas recuperaron la posesión del balón en su regreso al Carlos Tartiere y trataron de mover el esférico con rapidez de una banda a otra para derribar el entramado defensivo del conjunto de Tafalla, que defendía en propio campo e intentaba crear peligro en las acciones al contragolpe.

El cántabro Manu Busto volvió a actuar pegado al costado izquierdo y de sus botas nacieron la mayoría de las jugadas de peligro de los suyos e incluso forzó una cartulina amarilla a su marcador Soto, que se vio obligado a agarrarle para cortar una bonita acción individual en la banda.
Manu estaba cómodo en el terreno de juego y en una de sus primeras acciones llegó el primer tanto oviedista. Se zafó de dos rivales y sirvió un preciso pase interior entre los dos centrales para la llegada de Perona, que con la zurda elevó el balón ante la salida del guardameta Calvo. Era el minuto 13.

Ese tanto del valenciano inyectó de moral a sus compañeros, que llegaban con una mayor asiduidad a las inmediaciones del guardameta visitante. Hubo dos ocasiones de mayor peligro. La primera llegó por medio del centrocampista Jandro, que estuvo a punto de ampliar la renta en el marcador con un derechazo de primeras tras centro de Juanma, pero el esférico no vio portería. Y la segunda tuvo como protagonista al delantero Rubiato, que cabeceó a las manos de Calvo una asistencia de Víctor Díaz desde la banda derecha.

Con el paso de lo minutos, los locales parecieron bajar su intensidad en el juego y los visitantes comenzaron a estirar sus líneas hasta lograr el empate en el marcador en el minuto 33 al cabecear el ariete Gorka de Carlos una falta lateral.

En el tramo final, el local Manu Busto lo intentó con dos acciones individuales, pero sus disparos se marcharon desviados por muy poco.

Tras el tiempo de descanso, los oviedistas volvieron a imponer un ritmo muy alto de juego durante los primeros minutos. Las acciones por banda cobraban protagonismo y las llegadas al área rival volvían a aparecer, aspecto en el que Perona fue el actor principal. Cuando no habían transcurrido ni 2 minutos de la reanudación, Rubiato ganó la línea de fondo en el costado izquierdo y centró raso al área pequeña, el guardameta Calvo no acertó a blocar el balón y Perona no llegó a rematar por muy poco. 1 después, el propio delantero valenciano chutó ajustado al poste derecho tras una “peinada” de Rubiato dentro del área. Y en el 53 reclamó penalti tras ser derribado dentro del área por Ainzua.

Pero no sólo Perona disfrutaba de ocasiones, sino que Borja Rubiato, su compañero en la delantera, buscó fortuna en el minuto 50 con un remate de cabeza que fue despejado a saque de esquina por un defensor rival.

El empuje local disminuyó con el paso de los minutos y las acciones ofensivas no eran tan contundentes como anteriormente. El punto momentáneo parecía bueno para los intereses visitantes, que trataban de mantener sus líneas juntas para impedir las aproximaciones a su área.
Enfrente, los oviedistas, que querían la victoria, pero el tiempo jugaba en su contra. En un intento de reactivar el juego de ataque, el preparador Pichi Lucas dio entrada al centrocampista Nano, que volvió a jugar después de dos partidos, y al delantero Miguel en sustitución de Jandro y Rubiato, respectivamente.
Especialmente importante fue la labor del ariete de Llanera. Saltó al terreno de juego en el minuto 75 y se mostró muy participativo, dejando claro que quería aprovechar al máximo los minutos.
El tramo final del partido fue de infarto. Los locales se volcaron en el área de Calvo y en una de esas acciones llegó la jugada que marcaría el partido. Miguel recoge un balón en el área pequeña y cuando se disponía a chutar a puerta es golpeado por el visitante Ainzua. El colegiado señaló la clara pena máxima y Manu Busto anotó el 2-1 en el minuto 87.

En esos tres minutos finales hubo de todo. En el 89, el visitante Azpilicueta estrelló un balón en el poste derecho de la meta defendida por Aulestia y llevó los nervios a las gradas, pero Perona, en el minuto 90, aprovechó una combinación entre Miguel y Manu Busto para driblar al portero Calvo y poner el 3-1 en el marcador.
Cuando ya se jugaba el tiempo de descuento, Miguel estuvo a punto de redondear su actuación con el cuarto gol, pero el defensa Txitxo, en su intentó por despejar, marcó en propia puerta.

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