Gabino de Lorenzo y Toño García dialogan durante la recepción en el Ayuntamiento
Las palabras de Alberto González no dejan lugar a dudas. El máximo accionista del Oviedo no acepta la oferta presentada por José Antonio García para comprarle su paquete accionarial y el grupo mexicano dará paso el «plan b». La ampliación de capital parece ahora el camino más seguro de Toño García para hacerse con el Oviedo, en una operación que ofrece diversas dificultades.Las declaraciones del máximo accionista azul sobre la negociación planteada la semana pasada en Oviedo fueron acogidas con sorpresa por Toño García. «Sus palabras a la prensa me dejan un poco triste. Me reuní con él el viernes y no me dijo lo que ahora manifiesta. Me sorprende porque yo nunca he usado a los medios para hacer llegar mis mensajes», declara el empresario mexicano al otro lado del teléfono. García atiende la llamada desde Londres, ciudad a la que se ha desplazado para disfrutar de sus últimos días en Europa.
A mediados de esta semana, Toño García regresará a México. La idea del empresario es reunirse con Alejandro Burillo, dueño del grupo Pegaso, y Miguel Ángel Couchonal, presidente del Atlante. Desde México se asegura tener muy claro el plan a seguir desde el punto de vista jurídico, debido al apoyo del despacho de abogados Garrigues. El aspecto meramente económico es el que se tratará en los próximos días.
La alternativa responde obligatoriamente a una ampliación de capital, idea que Garrigues le ha planteado a Pegaso en los últimos meses. El propio Toño García confirma el cambio de rumbo en los planes: «Yo era reacio a activar el «plan b», pero a partir de ahora hay que buscar nuevas alternativas. La situación ha cambiado con el rechazo a la oferta».
Alberto González utilizó el nombre del Atlante, club del que García es presidente ejecutivo, para defender su negativa a la venta del Oviedo. El máximo accionista azul manifestó que «en las mismas condiciones económicas que me plantearon, compro yo el Atlante: pago 300.000 euros ahora y el resto cuando logre el Mundialito de clubes».
La frase no ha gustado en México, donde consideran la comparación fuera de lugar. «La diferencia es que el Atlante no está en venta. Yo no viajé a Oviedo a vender el club», indica García. Y añade: «Es mejor cortar relaciones con Alberto González y ponernos en manos de Garrigues para valorar otras alternativas».
Hugo López, presidente de la Asociación de Peñas Azules del Real Oviedo (APARO) y presente en la reunión que García mantuvo la semana pasada con el Alcalde, coincide en el análisis del mexicano: «Un presidente del Oviedo no puede ofrecer esa imagen porque está representando al club. Debe llevar las negociaciones con más elegancia. Además, ¿cómo puede hablar de comprar el Atlante cuando no tiene dinero ni para pagar a sus propios futbolistas?».
El siguiente paso de cara a una eventual ampliación de capital le correspondería al Ayuntamiento de Oviedo. Para convocar una ampliación debe ser promovida por al menos el cinco por ciento del accionariado. La primera dificultad radica pues en convencer al Consistorio en que tome esta decisión.
Una vez que quedara convocada, la votación de la ampliación de capital debe alcanzar la mayoría simple. Aquí es donde la operación presenta mayores obstáculos. González y Control Sport Siglo XXII aglutinan el 39.36 por ciento por lo que el apoyo a la iniciativa de Pegaso debe superar ese porcentaje.
Fuente: lne
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