El cambio accionarial en el Oviedo solo pasa por una venta de las acciones del máximo accionista de la entidad, Alberto González. El presidente azul se muestra reacio a promover una ampliación de capital, una de las vías que ahora maneja el empresario mexicano Toño García y no está dispuesto a negociar otra salida del club.
Toño García se desplazará la próxima semana a Oviedo para reunirse con el alcalde de la ciudad, Gabino de Lorenzo, en un encuentro que también contará con la presencia de representantes de la Asociación de Peñas Azules del Real Oviedo (APARO). El objetivo de la reunión es estudiar las diversas posibilidades de acceder al accionariado del club. Tras la ruptura de las negociaciones con Alberto González el pasado 31 de enero, Toño García dejó el asunto en manos del despacho de abogados Garrigues, mientras que el máximo accionista del Oviedo delegó este tema en el despacho madrileño de Julio Senn.
Garrigues sostiene que las acciones en poder de Alberto González no valen los dos millones que éste pide, pero el máximo accionista del Oviedo sigue pidiendo las mismas condiciones que en su negociación en México -esos dos millones de euros- y además sostiene que tiene otras vías de negociación abiertas. Con la supuesta negativa del máximo accionista a una ampliación de capital, la capacidad de maniobra de Toño García queda supeditada a la influencia que pueda ejercer el alcalde de Oviedo, Gabino de Lorenzo, sobre Alberto González, y la capacidad de éste para aguantar un enfrentamiento directo con el Ayuntamiento si al final el Consistorio se decide a apoyar de manera pública una ampliación de capital.
En este momento sólo tres accionistas -Control Sport Siglo XXII, el Ayuntamiento de Oviedo y Celso González- están en condiciones de solicitar de manera directa la convocatoria de una junta general extraordinaria en la que se sometería a aprobación la posibilidad de convocar una ampliación de capital, ya que son los únicos que sobrepasan con sus acciones el 5 por ciento del capital social.
No obstante, para llevarla a efecto se necesitaría superar en la votación de la junta el 39,36% del capital que controla Alberto González. Una tarea que requiere acuerdos que hasta ahora nunca se han dado. Con el capital que controla el Ayuntamiento (21,20%) y el de Celso González (14,04) se llegaría al 35,24%. Incluso sumando el 2,34% de Paco Gómez (máximo accionista del Cartagena) todavía estarían dos puntos por debajo del capital de González.
Los accionista minoritarios del Oviedo superan el 23%, una cifra que es importante pero que en todas las juntas celebradas hasta ahora apenas se traduce en un 2%.
Con este panorama, González espera acontecimientos sin inmutarse ante la grave situación económica del club. «No tengo noticias del viaje de Toño García. Lo único que sé es por la prensa. No tengo nada que decir, todo sigue su proceso», fueron sus declaraciones ayer, al tiempo que afirmó que su única prioridad es «ganar al Alavés, lo que nos permitiría acercarnos a los puestos que dan derecho a jugar la Copa del Rey».
Fuente: lne
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