La afición del Oviedo anima al equipo en el Tartiere
La buena racha ha instalado al Oviedo en un ritmo frenético. Apenas hay tiempo para disfrutar de las victorias. El equipo despacha partidos de forma funcionarial y ya piensa en el siguiente rival. Entre el oviedismo se ha instalado la sensación de que la temporada se puede hacer corta, a tenor de los últimos resultados, y la plantilla prefiere mirar al próximo partido antes que lamentar los meses de calendario que se han ido al traste.«Esperamos al Alavés con toda nuestra fuerza. Desde aquí quiero hacer un llamamiento a la gente para que nos apoye. Les necesitamos». Que la proclama venga de Pacheta no llama especialmente la atención. Lo que sí sorprende es el contexto. El entrenador azul animó a la afición a acudir al Tartiere apenas diez minutos después de vencer en La Muela. La sala de prensa del club aragonés fue testigo del inicio de un movimiento destinado a conseguir que el partido ante el Alavés presente la mejor entrada del año.
Aunque siendo estrictos la primera piedra en el objetivo la puso el club con su política de precios para el encuentro del domingo. Ante el Alavés, cualquier aficionado podrá retirar otra localidad por el precio de diez euros, cinco en el caso de los sub-18. La afición azul, pasional hasta la exageración para lo bueno y lo malo, parece haber recogido el guante.
A los pocos minutos de finalizar el partido ante La Muela las redes sociales se llenaron de mensajes con una idea: que el Tartiere presente el domingo la mejor entrada de la temporada. Algunos se atreven incluso a marcar una meta, alcanzar los 10.000 espectadores.
Los jugadores se suman a la iniciativa. «Recuerdo que en los partidos de la segunda vuelta del año pasado había un ambiente espectacular en las gradas. Este año nos gustaría que hubiera sido igual, pero entre los resultados y otros problemas no lo hemos conseguido. Espero que ante el Alavés recuperemos esas sensaciones», reflexiona Manu Busto, uno de los principales artífices de la remontada en la temporada pasada y que ahora parece volver a coger ese punto de forma que le hace peligroso. Rubiato le secunda: «Yo también hago un llamamiento para que la gente acuda el domingo al Tartiere. Será un partido entre dos equipos que merecen estar en una categoría superior».
Al cántabro no le sobra razón. En la presente temporada el índice de espectadores en el Carlos Tartiere ha descendido sensiblemente. Los problemas extradeportivos han sido una constante desde el comienzo que han minado la confianza de la afición en el equipo. La campaña ya se inició con una pérdida en el número de socios. El club cuenta con algo más de 12.000 abonados, cuando la temporada pasada fueron 14.500 los aficionados que retiraron su carné. El club justificó el descenso en la crisis económica, pero el ruido extradeportivo sesgó el número de socios.
Pero sobre todo la dinámica del equipo ha supuesto un freno. La temporada pasada ocurrió el efecto contrario. Al mal comienzo de temporada le sucedió una racha de resultados positivos que hicieron que la afición se enganchase al equipo. El punto álgido de la temporada llegó el 28 de febrero de 2010, con la visita del Sporting B. En aquella ocasión 17.274 espectadores dieron un colorido al Tartiere impropio de la categoría. Fue el máximo registro de la campaña.
Muy lejos del récord de la presente. La llegada a Oviedo del filial del Sporting también ha sido esta vez la ocasión en que las gradas presentaban un aspecto más fiero. El 13 de febrero, 8.053 espectadores fueron testigos de una de las derrotas más dolorosas para el oviedismo. La media de espectadores en el Tartiere es este año de 5.913 espectadores. La entrada más pobre se registró en la jornada quinta, contra el Mirandés. Entonces 4.354 aficionados presenciaron la derrota azul. La floja entrada contaba con la excusa de que el partido se disputó entre semana.
Ahora, la afición parece dispuesta a regresar al Tartiere. La buena marcha del equipo de Pacheta y la oferta del club pueden provocar la mejor entrada. Desde la entidad azul se prefiere no hacer aún valoraciones sobre la marcha de la venta en el día del acompañante. Las entradas empezaron a despacharse el lunes y seguirán vendiéndose en las oficinas del Carlos Tartiere y en la tienda oficial en Modoo
La afición del Oviedo anima al equipo en el Tartiere.
«Pacheta me asegura que en cuanto entre el primero llegarán los demás». Las palabras de Rubiato en los días previos al partido ante La Muela revelan la importancia de la confianza en los delanteros. El madrileño se ha convertido en el puntal ofensivo del equipo desde que el burgalés se hiciera cargo del conjunto azul, pero faltaba el premio del gol.
Tras rozarlo en varias ocasiones en Tafalla (con un remate al palo en el último minuto y un gol anulado de una forma sorprendente incluidos), Rubiato volvió a saborear el gol en el partido ante La Muela. El mismo rival que había sufrido su único tanto hasta la fecha en el partido de ida.
«Siempre he pedido tranquilidad porque en cuanto entra el primero después llega el resto. Creo que va a ser así. Tengo la confianza del entrenador y ésa es la baza más importante. Es algo que me ha faltado en las distintas etapas de la competición», asegura Rubiato. Sus ansias de gol se cruzarán con un rival complicado, el líder de la categoría: «Será una buena piedra de toque para valorar nuestro estado. El Alavés es el líder y un gran equipo. Con el apoyo de la grada todo resultará más sencillo».
Fuente: lne
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